Rubén Martínez se pasó esta mañana por la sala de prensa de Abegondo una vez confirmada su alta médica.
Quiso expresar públicamente el "agradecimiento a la gente que me apoya, que me mandó mensajes de apoyo. Estoy muy contento, muy agradecido, muy orgulloso por estos mensajes. Nada de presión ni de nada eso". "Agradezco el apoyo de toda la afición", concluye Rubén.
Reconoció que ante la oportunidad que se le presenta de poder volver a Málaga este domingo 19 de noviembre (12:00 horas, Bein LaLiga), ante uno de sus ex equipos, "cuando vuelves a uno de los equipos donde estuviste, siempre haces amistades. Yo me llevo muy bien con gente que está allí, ex compañeros, gente del club, trabajadores del club que me trataron fenomenal en mi etapa allí. Ver a toda esa gente, a la afición también por supuesto, siempre es especial".
A juicio del portero de Coristanco, "todos los partidos deben ser finales para nosotros, sobre todo contra equipos que están en posición similares o cerca ahí abajo. Nosotros tenemos que afrontar cada partido como si fuera una final porque para ser competitivos debemos ser así, como si fuera el último partido, donde nos jugamos todo. Si no nos costaría mucho sacar resultados".
Explica que la mentalidad con la que va el Dépor a Málaga es para "sacar los tres puntos. Ir a ganar fuera es importantísimo para nosotros. Que ganar un partido fuera no sea una anécdota, que sea algo que se nos de bien, jugar fuera, sacar puntos fuera, que sea algo a lo que nos acostumbremos. Lamentablemente estos últimos años al Dépor nos cuesta mucho ganar fuera".
Preguntado por las críticas recibidas por sus compañeros de demarcación durante su ausencia de los terrenos de juego, Rubén opina que "se cargó solo en una posición y esto es responsabilidad de todo el equipo. Todos los partidos que jugaron estuvieron más o menos acertados. En algunos partidos hubo más nivel que otros pero esto es responsabilidad de todos".
Por este motivo, cree que se "estuvo enfocando demasiado para una posición solo, cuando es responsabilidad de todo el equipo".
Después de dos meses de baja, confesó sentirse "bien, cogiendo sensaciones. Poco a poco fui cogiendo forma física, dolor bien, o sea que muy bien".
Así, recuerda que "tengo el alta médica y estoy a disposición de lo que decida el entrenador, que es el que manda. Un trabajador más".
Desvela que durante el tiempo de baja lo pasó "mal viendo competir al equipo y tú no puedes ni siquiera entrenar. Es una rutina que tienes. Te dedicas a lo que te gusta y es complicado no poder entrenar, no poder ayudar al equipo, no poder competir. No se lleva bien del todo".
