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Aguirre no cree que el Dépor esté pasando un bache; y pide "trabajar desde la humildad" y "dar el máximo nivel"

Diego Aguirre confesó esta mañana en la sala de prensa de ABANCA-RIAZOR que los jugadores blanquiazules están "bastante dolidos por cómo sucedió" el empate del pasado viernes en el estadio ante la SD Logroñés: "Es un gol que te meten en el último segundo. No tienes capacidad de reaccionar y se te queda cara de tonto; pero estamos tranquilos porque sabemos que estamos jugando bien. Tenemos nuestras ocasiones, el otro día siete u ocho claras. No las supimos materializar y al final en el fútbol se paga y el Logroñés nos supo meter mano".

Desvela que Borja Jiménez en la última sesión de vídeo "nos ha enseñado los fallos que cometimos, en qué podemos mejorar. Y también nos ha dicho que estemos tranquilos, que al final estamos haciendo muchas cosas bien. Es verdad que tenemos nuestros fallos, que estamos al principio de temporada. Y estamos trabajando para esos fallos que tenemos corregirlos y cada partido siguiente que tengamos poder mejorar".

A nivel personal, indica que "para todo jugador el no estar de titular se lleva un poco mal; pero es una competencia sana la que tengo con Héctor. Él está a un nivel increíble y es bueno para el equipo. Si él está a este nivel y nos está aportando grandes cosas, no hay que reprocharle nada y que siga haciéndolo".

Diego Aguirre se centra en el trabajo "día a día. Espero contar para Borja lo antes posible, y si él decide que salga desde el banquillo, pues ayudar al máximo a mis compañeros y aportar mi granito de arena".

Ante la SD Logroñés salió desde el banquillo en la segunda mitad pero en una situación más avanzada en el terreno de juego, justo por delante de Héctor en el carril izquierdo. A este respecto opina que "trabajo donde el míster me ponga. Si tengo minutos arriba pues hay que aprovecharlos y dar el cien por cien. En esta etapa futbolística que estoy me encuentro más cómodo atrás; pero soy profesional, he jugado mucho de extremo y será otra vez volver a acostumbrarme a recibir de espaldas, a movimientos específicos que tiene el extremo. Si tengo que jugar ahí, puedo jugar".

El carrilero blanquiazul relativiza el empate de la pasada jornada: "Por cómo empezamos todos pensamos que esto iba a ser muy bonito, pero en el fútbol de hoy en día cualquier rival te puede pintar la cara. Tenemos que ser conscientes de que estamos en Segunda B, que somos el Deportivo pero con el escudo no vamos a ganar. Tenemos que trabajar desde la humildad, pensar que todos los partidos van a ser difíciles y dar el máximo nivel. Si no estamos al máximo nivel nos tocará sufrir".

Es más, no cree que este sábado haya algo más que tres puntos en juego por el mero hecho de llegar al País Vasco después del empate pasado: "Todos los partidos, lleves diez victorias u once derrotas, hay que ganarlos. Todos son igual de importantes. Vamos con la idea de llevarnos los tres puntos porque es la única meta. Cualquier otro resultado nos va a doler".

En esta línea, subraya que "bache no tenemos. El otro día jugamos ante Unionistas, que va líder y tiene un campo muy difícil de hierba artificial, y competimos muy bien. El pasado viernes (frente a la SD Logroñés) dominamos el partido. Lo único que nos falló fueron los últimos diez, quince minutos y que durante el partido no supimos meterla. Es muy pronto para decir que estamos en un bache. Si seguimos en esta línea van a venir cosas bonitas".

Del Real Unión de Irún, rival este sábado 9 de octubre en el Stadium Gal (17:00 horas, Footters), apunta que "es un rival histórico, allí en casa son muy fuertes. Es un equipo que juega bien. Nosotros trabajamos los fallos que tuvimos el fin de semana pasado para corregirlos, estar más juntitos, intentar ir allí a quitarles el balón, a jugar nuestro fútbol y a poder volver a la senda de la victoria".