Álex advierte que "va a estar difícil hasta el final" pero tiene "confianza plena en salvar el año"
Álex Bergantiños fue el protagonista hoy jueves en la sala de prensa de Abegondo.
El capitán blanquiazul, sobre el empate ayer en el Carlos Tartiere, subrayó que "siempre quieres ganar. Luego analizas el partido y tal y como íbamos, por debajo, sacar un punto fuera de casa contra un rival directo y ganar el golaverage fue importante".
Titular ayer, admite que "no estamos del todo satisfechos sobre todo por la primera parte que hicimos. Salimos bien al campo y luego nos costó mucho entrar en la dinámica del partido, superar su presión. Estuvimos bastante incómodos".
Valora sobre todo "la reacción del equipo, el saber sobreponerse a un momento delicado como teníamos, con el penalti fallado, con el 2-0 abajo. Eso demuestra que hay plantilla y personalidad para dar la vuelta a situaciones complicadas. Intentaremos seguir en ese camino y mejorar".
Tras 6 partidos consecutivos sin ganar, el futbolista coruñés cree que el equipo "no tiene nada que ver con el de la primera vuelta. Ayer mismo, con todo lo mal que estuvimos en la primera parte, sus goles vinieron en acciones a balón parado. No creo que concediéramos lo que concedíamos en la primera vuelta ni mucho menos. El otro día contra el Sporting de Gijón no encajamos. El equipo es mucho más sólido, la plantilla está mucho más compensada".
Reconoce que en este tramo tan especial del campeonato, "nos está faltando un poco más para ganar. Pero en esta competición un poco extraña que nos encontramos después de todo lo que ha pasado hay que intentar adaptarse. Tuvimos poca recuperación, tenemos partidos cada dos o tres días, tenemos que rotar a gente, todos tenemos que sumar y adaptarnos a las circunstancias que hay".
Insiste Álex Bergantiños en que "veo un equipo que compite bien. Nos está faltando en esa igualdad que tiene la categoría un detalle que nos dé la victoria, pero creo que en general somos un equipo mucho más sólido y que estamos con opciones de ganar siempre. En la primera vuelta creo que hubo momentos en los que estábamos en el campo sabiendo que a la mínima íbamos a encajar, que no íbamos a ser capaces de competir el partido. No tiene nada que ver con lo que estamos viviendo ahora. Es el lastre que nos ha marcado la temporada, esa primera vuelta que hemos hecho. Ahora compitiendo mejor, necesitamos esa victoria que nos dé ese pequeño impulso que en Segunda te da el coger a 3 o 4 equipos. Enlazando una victoria y un empate cambia todo. En eso estamos, sabiendo que cada vez queda menos. Queremos conseguirlo lo antes posible pero sabiendo de la dificultad. Creo que somos un equipo totalmente distinto a lo que éramos antes".
Hablando de números para la salvación, comenta que "suele hablarse de los 50 puntos en Segunda. Con la igualdad que hay imagino que andará en torno a eso. Pero aquí tenemos experiencia de tener el descenso más caro de la historia en Primera, de tener el ascenso más caro y más barato. Cada temporada es diferente. En torno eso debe de andar porque la igualdad en la categoría hace que los equipos no sumen mucho más allá de esa cantidad para poder dejar a 4 por debajo. No podemos hacer números porque no sabes si necesitarás más victorias, si los empates pueden ser buenos al final. Hay que tener tranquilidad, mirar el partido siguiente porque esto no da respiro. Y estar preparados para intentar ganar ya".
Esta situación, según el centrocampista blanquiazul, "hace que el equipo no esté todo lo tranquilo que nos gustaría estar. Los que llevamos todo el año sabemos de dónde venimos. El poder estar ahora mismo en la situación actual era impensable en momentos de la primera vuelta. Y ahora mismo te ves ahí con la amenaza del descenso todavía pero el equipo tiene sensaciones diferentes. Lógicamente nos gustaría tener más confianza, empezar mejor los partidos o tener ese gol a favor que te haga soltarte un poco más o tener más tranquilidad para gestionar el partido pero es meritorio que a pesar de no haber empezado bien el partido, haber fallado un penalti, de verte 2-0 abajo, el equipo estuvo compacto, tuvo personalidad para seguir compitiendo, para imponerse al Oviedo en la segunda parte. Y eso a mí me da cierta confianza y tranquilidad para todo lo que nos espera. Sabemos que va a estar difícil hasta el final, que en Segunda es esto. La situación en la que nos hemos metido durante el año nos va a hacer sufrir hasta el final. Pero tengo confianza plena en que podamos salvar el año y después de todo lo que hemos pasado poder terminarlo de la mejor manera".
Finalmente, recalca sobre el Rayo Vallecano, rival del Dépor este sábado 20 de junio en ABANCA-RIAZOR (17:00 horas, Movistar LaLiga), que "siempre al bajar de primera los equipos tienen un potencial de 11 y de plantilla un poco superior al resto. El Rayo creo que es el equipo que menos partidos ha perdido en la categoría. Ha empatado mucho. Por eso está ahí en torno a los puestos de play off. Pero es un equipo hecho para el ascenso; y con jugadores con un potencial muy alto".
Solicita en estos próximos 90 minutos, "intentar gestionar lo mejor posible los esfuerzos después de jugar cada 3 días e intentar estar preparados para adaptarnos durante el partido a todo lo que vaya pasando. Parece una competición diferente con las pausas, con los cambios, con partidos cada tres días. El equipo que aguante mejor mentalmente va a ser el que mejor compita".
