Aranzubía: La base del equipo es la misma y eso es algo que tenemos ganado ya
La primera plantilla deportivista trabajó ayer en Abegondo por grupos, entre el césped y el gimnasio de la Ciudad Deportiva blanquiazul. Hubo pruebas médicas en el vestuario y más test físicos en el campo número s
-¿Qué tal de vacaciones?
-Bien. Hasta que se acaban, muy bien. Luego toca trabajar.
-¿Cuál es tu declaración de intenciones?
-Pues prepararnos bien para recuperar fuerzas y el tono físico. Ahora mismo toca ésto.
-La plantilla del Dépor cada vez es más joven.
-En el fútbol se cumplen ciclos. Hay jugadores que nos vamos haciendo más veteranos y van llegando otros.
-¿Qué impresión tienes de las caras nuevas?
-Pues apenas estamos en contacto porque estamos entrenando por grupos. Cuándo coincides en el vestuario siempre intentas hablar con ellos para hacerles la aclimatación más fácil.
-Tú salvaste muchos puntos al equipo estos años.
-Para eso estamos los porteros, para evitar los goles.
-Fuiste campeón del mundo Sub-20, ¿qué sientes ante la final de la Selección de mañana?
-Pues una envidia sanísima ahora que va a jugar una final de un Mundial y que puede ser campeona del mundo.
-Pudiste haber seguido esa línea de Casillas, Marchena...
-Son tres los que están ahora que estuvieron conmigo hace ya once años. Yo de todas formas no me puedo quejar de cómo me fueron las cosas. Estoy aquí encantado.
-¿Qué darías por estar allí?
-Todo. Para un futbolista estar en un Mundial es lo máximo. No digamos en una final.
-¿Cómo ves el partido ante Holanda?
-Todos vemos a España como favorita.
-Volviendo al Dépor, hay una amalgama interesante de jóvenes y veteranos.
-Yo creo que éso pasa un poco en todos los equipos.
-La temporada pasada se hablaba de mantener un poco la base para este año, ¿se ha conseguido?
-Sí. La base continúa. Aunque hubo alguna salida, los jugadores somos los mismos y el entrenador igual. En ese sentido ésto lo tenemos ganado.
-Los aficionados del Dépor piensan que este año será el de volver a Europa.
-Es lógico que lo piensen y que estén ilusionados porque nos hemos quedado a las puertas ya un par de veces.