El vestuario blanquiazul se lamenta de estar en la segunda parte "acelerados" y "demasiado precipitados"

Mario Soriano y Diego Villares se pasaron por la zona mixta de ABANCA-RIAZOR.

El atacante madrileño, autor esta tarde del gol del empate, se marcha con una sensación "regular. En la primera parte hemos estado mejor porque hemos tenido más tranquilidad con el balón. Una vez que llegábamos con los laterales nos ha costado en la última fase, la finalización. En la segunda, a raíz del gol (del Pontevedra CF) hemos estado más acelerados, más alborotados. Hemos hecho dos jugadas muy buenas, ha llegado el gol. Luego he tenido una oportunidad que no he llegado por poco. Hay que analizar el partido y es un punto que tenemos que hacer bueno el finde que viene en Vigo".

Pide eso sí dar valor a este punto: "Llevamos 7 de 9. Queda muchísima liga.Hay que seguir trabajando y el finde que viene en Vigo hacerlo bueno", insistió.

Máximo goleador del Dépor con 3 goles, Mario Soriano destaca que quiere "ayudar al equipo en todos los aspectos. Si es en los goles, muchísimo mejor para mí. Toca seguir trabando y mejorando cada día".

Por su parte, Diego Villares se lamenta de que "atacamos demasiado precipitados y eso nos llevó en la segunda parte mayormente a tener que defender sus transiciones, con muchos metros hacia atrás que nos pudo costar el partido".

Reconoce que a partir del gol del Pontevedra CF "nos costó un poquito más atacar y más precipitados. Al final metimos un gol más por empuje que por juego".

El mediocentro deportivista cree que los nervios "no nos tienen que influir para nada. La mayoría ya somos veteranos, sabemos lo que nos jugamos. Eso no puede influir nada", concluye.