Mejora cada día el Dépor, que avanza a octavos de final en la Copa del Rey
Un pasito más del Deportivo, cada vez con más confianza en su juego. Esta noche sumó su tercer triunfo consecutivo (dos de Liga ante Espanyol y Levante y el de hoy de Copa) y eliminó al Osasuna (2-1) de los dieciseisavos de fin
El partido de esta noche deja varias lecturas. En primer lugar, la juventud con la que Lotina afrontó esta ronda y que dejó constancia de su valía: Seoane, Juan Domínguez, Rochela, Rubén Pérez bajaron mucho la edad media del once de Riazor. En segundo lugar, la delantera. Dos de los arietes del equipo, Riki y Lassad, marcaron a Osasuna. Poco a poco el tiempo le va dando la razón a Lotina, quien no se cansó de repetir en sus comparencias públicas que estaba muy contento con los delanteros del equipo. Y en tercer lugar, durante la mala racha de resultados con los que el equipo comenzó la Liga, se habló siempre en las ruedas de prensa de saber competir. Hoy el Dépor supo competir, con sus virtudes y sus defectos, como cualquier equipo de fútbol. Pero compitió. Y éso muchas veces basta para superar al rival.
El choque de todos modos fue igualado, con un Osasuna que vino claramente a pasar la eliminatoria a pesar del 1-1 del Reyno de Navarra. Sólo los pequeños detalles (en la ida el gol del empate de Saúl y esta noche la expulsión de Sergio por doble amarilla o el acierto en el remate blanquiazul) decidieron el pase.
Salió Osasuna al césped de Riazor dominador. El Deportivo, con su línea de cinco ya talismán, se vio obligado a aguardar en mediocampo las embestidas iniciales navarras, sin agobiar tampoco a Manu. Los deportivistas salieron con un once inédito, en el que Juca, Juan Rodríguez y Juan Domínguez llevaron la manija en mediocampo. Quería Lotina dosificar a hombres como Lopo, Adrián (éstos ni entraron en la lista) o Rubén Pérez y Colotto (suplentes de inicio). Pero el fútbol dispone. Rubén se vio obligado a entrar por Juca a la media hora de partido; y Colotto en la recta final relevó al también tocado Ze Castro.
Al descanso se llegó con 0-0 y con mucha igualdad. Todo podía pasar.
En la segunda parte se adelantó el Dépor. Valerón desplaza a la banda un rechace de la defensa navarra. Ze Castro, que siempre cae a banda tras los saques de esquina o de falta, cuelga un balón de rosca perfecta para que Riki marque de cabeza. Poco después, Sergio, que volvía al once de Osasuna tras superar una lesión de rodilla, dejaba a su equipo en inferioridad numérica. El Dépor se dedicó a tocar y tocar la pelota, con lo que parecía bastar. Sin embargo, Camacho comenzó a sacar gente alta y de ataque (Masoud, Soriano o Kike Sola). En una indecisión de la zaga blanquiazul, Lekic anotó el empate que forzaba la prórroga.
La ilusión visitante duró poco, puesto que apenas tres minutos más tarde, Lassad, que había relevado a Riki, se reencontró con el gol que dio el pase a octavos de final.
A partir de ahí Osasuna empujó a base de balones colgados e incluso disfrutó de una buena oportunidad en el descuento en un balón que se quedó muerto en el área deportivista. Finalmente sacó la defensa coruñesa, poniendo punto y final al partido.
Al final, triunfo del Dépor (2-1) y a octavos de final de Copa. El domingo 14 de noviembre a las 17.00 toca pensar en la Liga, con la visita el Iberostar de Palma de Mallorca.
Deportivo: Manu; Seoane, Rochela, Aythami, Zé Castro (Colotto, m. 74), Morel; Juan Domínguez, Juan Rodríguez, Juca (Rubén Pérez, m. 28), Valerón; y Riki (Lassad, m. 54).
Osasuna: Riesgo; Nelson, Sergio, Josetxo, Monreal; Juanfran (Soriano, m. 67), Lolo, Nekounam, Calleja (Kike Sola, m. 67); Vadocz y Lekic (Masoud, m. 82).
Goles: 1-0, m. 53: Riki; 1-1, m. 62: Lekic; 2-1, m. 64: Lassad.
Árbitro: Fernández Borbalán, del colegio andaluz. Expulsó por doble amarilla al defensa de Osasuna Sergio. Además, mostró amarilla al navarro Calleja y al deportivista Juan Domínguez.
