Óscar Gilsanz, técnico del Fabril, subrayó esta mañana en rueda de prensa en Abegondo, al iniciar la pretemporada, que "el objetivo principal es que los jugadores se acerquen al primer equipo. Es una satisfacción para mí y para el trabajo de mucha gente en el Club que haya jugadores que estén cerca de ese primer equipo, que estén participando y que estén demostrando que #ANOSACANTEIRA también tiene sitio", subrayó en alusión a los muchos canteranos que cada día se entrenan a las órdenes de Borja Jiménez: Noel, Yeremay, Alberto, Trilli, Brais Val, Brais Suárez, Iván Guerrero, Guille Bueno y Juan Rodríguez.
En esta línea, más que objetivos competicionales, prefiere el entrenador coruñés "hablar de rendimiento, que los jugadores a nivel individual y a nivel colectivo tengan un rendimiento lo más cerca posible de su óptimo. Después la clasificación te irá poniendo donde mereces. Un Fabril en Tercera RFEF debe estar lo más arriba posible siempre pero me gusta hablar más de rendimiento".
Ve con naturalidad su salto al filial tras haberse proclamado campeón de España con el Juvenil A: "El fútbol y las necesidades de los clubes van marcando lo que el Club requiere de ti. El fútbol tiene estas cosas. Unas veces las cosas van muy lentas y otras demasiado rápido. En 48 horas cambió la perspectiva y nada más".
No se para a pensar en que esta temporada no podrá disputar con el Juvenil A la Youth League, ganada tras la histórica 'Final Four' del pasado mes de junio en Marbella: "Es atractiva por la posibilidad de partidos atractivos y de experiencias nuevas, diferentes. Los que estamos metidos en este mundo no podemos pararnos a pensar lo que pasaría si o no... Es un paso que dimos y no hay que mirar atrás. El proyecto de un filial en Tercera División para mí es muy atractivo. Estoy deseando empezar para poder seguir trabajando".
Finalmente, Óscar Gilsanz pide paciencia con #ANOSACANTEIRA: "A partir de ahora los tiempos son importantes para todos. Los jugadores son diferentes unos de otros. Unos crecerán más rápido, darán pasos más rápidos; otros menos. Hay que ser conscientes de ello y tratarlos de una manera individualizada. Se me ocurre la palabra paciencia. Tener un poco de paciencia con ellos y que ellos vayan marcando su propio camino".
