Coincidiendo con el 25º Aniversario de la consecución del primer título de la historia del Real Club Deportivo, la Copa del Rey de 1995, el 27 de junio de aquel año en el Santiago Bernabéu de Madrid, se ha presentado la imagen de la camiseta blanquiazul de la temporada 2020-2021, bautizada como Pel'95 en la parte posterior exterior del cuello, junto a la silueta de la Copa, y bajo el lema común de Espírito'95 en la etiqueta interior, elemento idéntico para toda la colección de elásticas de la temporada.
Recuperar un diseño que marcó una época: el ascenso del 91, la promoción del 92, el subcampeonato de Liga del 94, el debut europeo y la culminación con la Copa y SúperCopa de 1995, es el homenaje que desde el Real Club Deportivo se quiere realizar a todos los que protagonizaron aquella etapa inolvidable y a todos los deportivistas que disfrutaron del Súper Dépor en primera persona. También es una forma de contar y recordar a las nuevas generaciones de aficionados blanquiazules lo que sucedió hace un cuarto de siglo.
La camiseta recupera los detalles más significativos de aquel diseño de principios de los 90: las líneas en forma de T en la parte frontal, la doble línea en las mangas con un espacio blanco que en aquella época ocupaban los dorsales, y que la próxima temporada estárá ocupado por las marcas de LaLiga y Luckia, el cuello tipo polo y rematado en pico, además del homenaje textual a la efeméride. Tanto debajo del escudo, con la leyenda: "25 aniversario. Campións Copa do Rei 1995" como en la cinta elástica interior de la parte inferior con las leyendas: "CAMPIÓNS 1995 RCDEPORTIVO A CORUÑA 1906", todas ellas separadas por la silueta de la copa.
Los pantalones también llevarán la clásica línea blanca de aquel diseño mientras que las medias serán completamente azules.
Los encargados de lucir por primera vez la camiseta, que estará disponible en las DéporTiendas al comienzo de la Temporada 2020-2021, son Alfredo Santaelena y Javier Manjarín, protagonistas con sus goles de la inolvidable final del 24 y 27 de junio de 1995, marcada por su acierto y por el aguacero que obligó a suspender la final y posponer el feliz desenlace final tres días. 25 años después de nuevo les tocó mojarse de nuevo para recuperar el Espíritu del 95.
