Álex cree que la expulsión condiciona y Quiles es rotundo al afirmar que "en ningún momento me tiro"
El capitán Álex Bergantiños y Alberto Quiles se pasaron por la zona mixta al concluir el encuentro.
El mediocentro coruñés cree que la derrota fue "muy dura. El partido es especial para todos y perderlo así duele. En el vestuario, gente cabizbaja, silencio, mucha frustración. Toca reponerse. Hemos hecho un partido con más méritos de lo que refleja el resultado y hay que rescatar las cosas positivas para mirar hacia adelante".
Califica de "desproporcionada" la expulsión de Quiles. "No podemos controlarlo. Podemos pensar en mil teorías conspiranoicas... No lo sé. Tenemos que intentar centrarnos en el juego. Ha condicionado mucho la expulsión. El campo estaba inclinado hacia allí. Hemos ajustado muy bien después de los primeros minutos. El partido estaba para nosotros. La expulsión todo cambia".
Eso sí, pidió hacer también autocrítica "de pequeñas cosas que podíamos haber hecho también con 10. Hemos entregado totalmente el balón y algo más podíamos hacer. A seguir, mirar hacia adelante. Venimos de una racha en la que hemos sumado mucho menos en esta segunda vuelta. Tenemos que levantarnos y crecer en base al juego".
Quiso agradecer el esfuerzo de #ANOSAFORZA por su apoyo desde la grada y "ojalá sigan con esa fidelidad al deportivismo y que puedan vivir este derbi más arriba. Tarde o temprano volverá a vivirse. Estoy convencido".
Por su parte, Alberto Quiles quiso en primer lugar "pedir perdón a #ANOSAFORZA porque sabemos lo que significa este partido".
A continuación, aclaró la acción del penalti: "En ningún momento me tiro. Me tropiezo y me hago hasta daño en la muñeca. El árbitro interpreta que me he tirado, me enseña la segunda amarilla y dice que se juega su carrera arbitral y que si lo pita, tiene un problema. Yo le digo que lo entiendo pero que no me tiro, me caigo solo. Es más, intento coger el balón, por eso me hago daño en la muñeca. Y la segunda explicación que me da es que en el primer tiempo Mario se tiró un par de veces en el área y una tercera no podía ser".
Al delantero andaluz le parece también "increíble" que el defensor céltico no reciba la segunda amarilla en el penalti a William de Camargo "después del palo que le da".
