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Miku pide disfrutar el momento y cree que el equipo "está mejorando en muchísimas cosas que al principio de liga no hacíamos tan bien"

El delantero venezolano Miku subrayó esta mañana en la sala de prensa de Abegondo que estas semanas, después de dos triunfos consecutivos que auparon al equipo al liderato en solitario del grupo 1 de Primera RFEF, "se viven realmente bien porque el equipo ha hecho las cosas muy bien para estar donde estamos actualmente. Hay que disfrutar del momento. Obviamente nuestro objetivo está muy claro pero siempre es bonito saber que estás comandando la tabla. A disfrutar porque estamos haciendo las cosas bien, pero como ha dicho el míster es una tarea semanal, esto es muy largo y aún falta mucho camino que recorrer".

Por consiguiente, pide disfrutar "de lo que es este año y de lo que podemos conseguir todos juntos, el Club, #ANOSAFORZA, medios de comunicación. Estamos todos en la misma dirección y eso es muy positivo para el deportivismo. El reflejo está ahí, en el trabajo del equipo, la implicación de todos, de hasta cuándo juega el Juvenil, #ANOSAFORZA responde".

Con cinco goles en su casillero, opina que "el estado de ánimo es reflejo de lo que ocurre dentro de la cancha. El equipo está haciendo buenos partidos, hemos tenido nuestros altibajos como todo en la vida, pero en líneas generales el equipo está respondiendo, está creciendo, está mejorando en muchísimas cosas que al principio de liga no hacíamos tan bien; y eso es motivo de tranquilidad en el sentido de que ves que progresa y que aún no ha llegado a su techo".

Advierte pues que "tenemos mucho margen de mejora. Podemos mejorar en ser más eficaces de cara a gol y crear todavía muchas más ocasiones, en la gestión de los últimos minutos que si te has dado cuenta en algunos partidos sufrimos mucho... Estos partidos ya se están sufriendo menos, el equipo se está sintiendo más seguro jugando en esa situación. Los delanteros podemos mejorar todavía de cara a gol, los centrales pueden mejorar la salida de balón, los laterales en ponerlo y así te podría decir mil cosas".

A nivel individual, se esmera el ariete blanquiazul en "entrenar, trabajar, ponérselo difícil al entrenador, competir internamente con tus compañeros y de forma sana por un puesto y cuando se juegue intentar hacerlo lo mejor posible".

Así, reitera que un puesto en el once "hay que ganárselo cada día, con entrenamiento, con actitud, con trabajo. Por mi forma de ser siempre intento ser protagonista y trabajo para ello. Tengo que honrar la profesión y la profesión es entrenarme como el que más, trabajar día a día. Y esas decisiones las toman otros. He vivido todas las situaciones: la de jugar más, jugar menos, la de ser importante, menos importante... Pero mi actitud siempre ha sido la misma y he dejado que las decisiones las tomen otros. Veo lo que puedo hacer por mi parte y no quiero que nunca me digan que 'dejaste de hacer esto o que no hiciste esto y por eso no cuento contigo'. Hago todo lo que tengo que hacer, lo que está en mi mano y que otros sean los que decidan".

En cuanto a la igualdad en la competición, Miku reconoce que no se la esperaba así pero "con el devenir de las jornadas y viendo todos los equipos me parece que es una liga que no es la antigua Segunda B porque estás reuniendo a los mejores de cada grupo. También nos considero a nosotros y a otros tantos del grupo que tienen nivel para jugar en Segunda División. Es una categoría que está muy cerca de lo que es el fútbol profesional y que tiene un grupo de equipos que aspiran a lo mismo que nosotros: con historia parecida o por presupuesto o porque en los últimos años han estado en Segunda. Hay muchos equipos aspirando a lo mismo y el nivel de los equipos así lo demuestra en los dos grupos".

Preguntado por el rival de este domingo 14 de noviembre (12:00 horas, Footters) en ABANCA-RIAZOR, el Extremadura UD, se solidariza con el vestuario azulgrana, compañeros de profesión, y afirma que "ojalá juguemos, porque eso quiere decir que ellos han podido llegar a un acuerdo o solucionar algo su situación que es muy dura que por suerte no he vivido en mi carrera". "Es una tristeza y una vergüenza que esto ocurra a día de hoy porque encima si ellos se niegan a entrenar los pueden despedir y casi que ellos tienen que indemnizar al equipo por no presentarse. El trabajador está fastidiado y la gente tiene que saber que esto es el fútbol, pero es nuestro trabajo, nuestro estilo de vida, nuestra forma de vivir", añadió.