El Deportivo firmó el resultado deseado frente al Granada, ya que la victoria no solo sirvió para superar en la clasificación al equipo rojiblanco, sino que, pensando en el desenlace de la competición, garantiza al Dépor el golaverage particular frente a uno de los equipos destacados del campeonato.
Para conseguirlo, Natxo González mantuvo la base defensiva del partido frente al Tenerife. Los cambios llegaron en el centro del campo con el regreso de Pedro Mosquera en lugar de Didier Moreno y la permuta arriba con la entrada de Fede Cartabia en lugar de Christian Santos, provocando además un cambio de sistema inicial a un 4-1-4-1.
En el once de salida Álex Bergantiños, que se enfrentaba a uno de sus exequipos luciendo el brazalete de capitán y enfundándose la camiseta del Dépor por ocasión número 200 en partido oficial con el primer equipo, lo que lo sitúa en el top-50, entre los más de 1.000 jugadores que ha tenido el Dépor, en número de partidos disputados.
El dominio de balón fue para el Deportivo en el primer cuarto de encuentro. A pesar de ello, los corazones de los deportivistas se aceleraron con un balón atrás hacia Dani Giménez que el portero blanquiazul sacó con criterio, pero esperando a que estuviese a tan solo una cuarta de la línea de gol.
Un tiro de Borja Valle desviado por Germán y que se envenenó para la parada de Rui Silva fue el prólogo de la primera gran ocasión del Dépor, una pared en la frontal entre Cartabia y Caballo que acabó finalizando el argentino con un gran tiro que se marchó a escasos centímetros de la portería nazarí.
En el minuto 25 llegó un buen remate de Ramos un tanto forzado que sacó a córner a una mano Dani Giménez. Al remate del córner el Granada dispuso de su primera gran ocasión con el disparo de Martínez con potencia al larguero.
En el minuto 32 el Dépor anotó un gol por mediación de Quique, anulado tras una falta previa en el remate que no había existido por parte de ninguno de los jugadores que subieron a rematar la falta botada por Fede Cartabia al segundo palo.
En el 38 Borja sirvió un buen balón para Quique que el delantero blanquiazul no pudo rematar a puerta al perder el control en la recepción, control que también se le fue, en este caso en la asistencia, a Fede Cartabia instantes después. Las imprecisiones en los últimos metros, en área local y visitante, marcaron la segunda mitad del primer tiempo.
En la reanudación el Dépor encontró pronto premio a su presión alta. Un balón que quería sacar la zaga local en largo pegó en el costado de Fede Cartabia que dio una involuntaria pero trabajada asistencia a un Quique González que le pegó con toda el alma, raso, para batir a Rui Silva y poner el 0-1 en el marcador con 40 minutos de partido por delante.
Camino del 60 el Granada pidió penalti por agarrón de Pablo Marí a Germán dentro del área a la salida de un córner, acción que el colegiado madrileño ordenó continuar.
La segunda parte se fue por unos derroteros diferentes a la primera, con menos llegadas de ambos equipos, juego más trabado y choques contundentes en el centro del campo entre los contendientes.
Una buena conducción entre el recién entrado Nahuel, Pedro Mosquera y Borja Valle concluyó con un pase atrás al centrocampista coruñés por parte del berciano que Mosquera remató desde la frontal con rosca pero sin la potencia suficiente para sorprender al portero local.
El siguiente en intentarlo, a quince del final, fue el propio Borja disparando alto.
A diez minutos del noventa, justo tras la entrada de Didier Moreno por Pedro Mosquera, se produjo la jugada más polémica del partido, aunque indudablemente clara. El colegiado inicialmente concedió gol de Puertas, pero todo el Dépor y el asistente vieron como el jugador nazarí había rematado con la mano al fondo de la portería de Dani Giménez. La jugada se quedó en un susto para el Dépor y enloqueció los últimos minutos de partido, en los que fue expulsado Yván Castillo del banquillo blanquiazul.
En medio de la locura, que acabó también con la quinta amarilla para Domingos Duarte y la expulsión con roja directa por una acción en la que Nahuel no golpea al rival, Dani Giménez salvó el empate en un remate franco a escasos metros de la portería. Fue la jugada clave de un desenlace de partido marcado por la tensión, las expulsiones y las faltas constantes para dejar acabar un partido fundamental.
Con los 3 puntos el Dépor supera al Granada en la clasificación y se garantiza el golaverage particular tras las dos victorias blanquiazules ante los granadinos. Un triunfo que mantiene al equipo a menos de un partido del liderato y que insufla confianza tras firmar pleno en los dos últimos partidos lejos de ABANCA-RIAZOR.
Granada CF: Rui Silva, Germán, Víctor Díaz, Martínez, Quini, Montoro, Fede, Pozo, Fede Vico (Dani Ojeda, min. 79), Vadillo (Antonio Puertas, min 65) y Adrián Ramos (Rodri, min. 55).
RC Deportivo: Dani Giménez, David Simón, Domingos Duarte, Pablo Marí, Diego Caballo, Edu Expósito, Álex Bergantiños, Pedro Mosquera (Didier Moreno, min. 79), Borja Valle (Michele Somma, min. 87), Fede Cartabia (Nahuel, min. 66) y Quique González.
Árbitro: Pizarro Gómez (C. Madrileño). Amonestó a David Simón (min. 18), Montoro (min. 68), Antonio Puertas (min. 80), Rodri (min. 80), Ramos (min. 84) Didier Moreno (min. 85), Diego Caballo (min. 90), Domingos (90+2), Quini (90+2).
Goles: 0-1 Quique González (min. 49).
Incidencias: partido correspondiente a la 25ª jornada de LaLiga 1|2|3 disputado en el Nuevo Los Cármenes ante 13.128, más de un centenar de ellos aficionados del Dépor.
