Rubén Martínez, uno de los protagonistas ayer en el encuentro ante el Sevilla FC, manifestó esta tarde en la sala de prensa de Abegondo que el empate sin goles le deja una sensación "agridulce porque hicimos un muy buen partido. El rival era un rival muy importante. Los 3 puntos eran importantísimos para meterle presión al Levante pero tenemos que valorarlo como bueno por el equipo que era y porque, dentro de lo que cabe, podemos seguir peleando. Pero en general la sensación es agridulce".
Acabó el partido el meta deportivista "entre la decepción y el orgullo. Se vio un equipo que luchó, que tiene las ideas claras, que podía hacer buenas cosas. Y en eso estamos y seguimos. Esperemos que de aquí al final llevemos una alegría muy grande".
Preguntado por su brillante actuación individual, apunta que "cuando no llevas los 3 puntos, aunque siempre es positivo mantener la portería a cero, la sensación no es buena. Si el equipo gana sí que es una satisfacción plena. Así, con el empate con la situación que estamos, no es para estar contento".
Sin apenas descanso y con otro partido este viernes 20 de abril (21:00 horas, Bein LaLiga) en Leganés, advierte que aunque "no tengamos costumbre de jugar entre semana, de momento el equipo respondió bien. Después del Athletic de Bilbao, que fue un partido duro, ayer el equipo se vio bien físicamente ante un equipo acostumbrado a jugar entre semana. Creo que vamos a tener fuerzas el viernes. Mejor es tener más días de descanso, pero el calendario lo pusieron y no hay nada que hacer. Hay que adaptarse".
En cuanto a su renovación automática de su contrato con el Dépor, Rubén insiste en que "no supone nada porque todo lo individual queda en un segundo plano. No es momento de plantearse ningún tema individual. Lo que cuenta es el equipo y apurar las opciones al máximo".
