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Semblanza de Ramón de Llano. Primerísima figura en la Historia del Deportivismo

Mientras el Deportivo estaba en Venezuela, en Coruña uno de los más importantes comentaristas deportivos de la ciudad, “Marathon”, publicaba en su sección de la “Hoja del Lunes” una semblanza de Ramón de Llano y Martín. Don Ramón, que había sido un eficie

LA FIGURA MÁS EMINENTE DEL Club

(...) ...don Ramón de Llano y Martín es –todavía- la figura, la personalidad más decisiva y culminante en los primeros setenta años de vida de nuestro Real Club.

Largos años de visita diaria, por mor de la información, a sus despachos de Secretario General, en la calle de los Olmos, en “La Terraza” y en la Marina, me descubrieron la presencia de un hombre extraordinario en la virtual dirección del Club; en su peliaguda administración, sacando pesetas de donde no las había; en su habilidad -¿maquiavélica?- para esquivar a los acreedores y a los jugadores –y para él el jugador era lo primero- que se le presentaban a cobrar la mensualidad en fases de grave crisis económica; en su trato amable y complaciente con los informadores de Prensa; en su multiplicada gestión de secretaría como administrador, como “ojeador”, como “patrón de pesca”, como mediador del Club con las Federaciones nacional y regional... Hasta tal extremo que en sus años de actividad secretarial se lo quiso llevar, como adjunto, aquel gran Secretario de la Real Federación Española de Fútbol que fue Don Ricardo Cabot.

(...) Jamás he olvidado aquella sentencia suya de los años cuarenta (...) cuando el genio inigualable de Eduardo González Valiño hacía presagiar el inexorable declive y una masa de aficionados reclamaba su cese y sustitución. “Esto no se arregla mientras no echen a Chacho”, se decía. Yo preguntaba entonces: “¿Y a quien ponemos en su lugar?”. Y “la masa” respondía inconscientemente: “A cualquiera”. Ramón de Llano lo comentaba a su entender filosófico y agudo: “La delantera del Deportivo sin Chacho es como cinco caballos desbocados”.

Sí, para mí no hay duda de que don Ramón de Llano fue –y sigue siendo- la figura, la personalidad más culminante y decisiva en toda la Historia del Real Club Deportivo. Como que en ocasiones, de gravísima crisis, sin Junta Directiva, sin nadie a su lado, fue la única persona que salvó al Club de la desaparición. Por eso cuando el Deportivo, en 1956, festejó sus “bodas de oro”, la Junta Directiva, presidida entonces por Don José Luís Pérez Cepeda, le rindió los merecidos homenajes nombrándolo Secretario Perpetuo de Honor y socio Honorario, distinciones grabadas en una placa de plata que le fue entregada públicamente.

Como figura histórica en la vida del Club, quienes fuimos sus amigos y admiradores confiamos en que su nombre vuelva a ser recordado, dentro de un lustro, en la celebración de las bodas de diamante del Deportivo.