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Lo que se dijo hace un año....

... sobre la Copa del Rey. Radios, prensa, televisión. El Deportivo fue noticia, antes y después del partido del Bernabeu. Noticia porque contra todo pronóstico, se impuso ante el Real Madrid, en su feudo, en el día de su fiesta.


Alocución radiofónica de Pepe Domingo Castaño, como cierre del programa `El Larguero', tras la final de Copa 2002. El programa se emitió desde el Santiago Bernabéu.

Me estoy acordando ahora de aquella tarde loca de Carnaval, cuando Paco González viajaba con su juventud a los años cincuenta para recuperar lo que la historia llamó Maracanazo.
Seguramente, no se daban idénticas circunstancias, cierto que eran otros tiempos, el fútbol caminaba por senderos distintos a los de hoy, pero esta noche el Depor luchaba contra demasiados gigantes, el centenario, la psicosis madridista de victoria, el agobio inevitable del triplete, el sonido de un lugar que no era el suyo y, casi con toda seguridad, la palabra de todos los que decían saber de esto. Y mira por dónde, un 6 de marzo del año capicúa la víctima supuesta se levantó de los pronósticos para repetir el mismo trofeo en el mismxo lugar, con el frío que venía del norte ocupando el lugar que aquel día protagonizó el vendaval. Con el Depor nunca sabes qué te vas a encontrar, si el equipo contagiado del espíritu gallego proclive al derrotismo, o ese otro grupo de nombres y de hombres seguros de que, si sales a ganar, el fútbol siempre te ayuda a acortar las distancias anímicas y deportivas. Hoy, emergió, cuando más lo necesitaba, el espíritu de la vieja señora y ni siquiera ese triplete que viajaba en un seguro millonario fue capaz de romper el sueño de esos miles de locos maravillosos que cerraron los ojos, le hicieron un regate al trabajo y enlazaron La Coruña con Madrid por una autopista azul y blanca. A estas horas, esa ciudad que llamaban de cristal, en la que dicen que nadie es forastero, vuelve a cantar otra vez ese Aúpa Depor triunfal al que ya se está acostumbrando Lendoiro.
Han pasado todos por aquí, los vencedores y los vencidos, la cara y la cruz de la fiesta. Irureta sacó del alma su pizarra para explicar a qué te obliga saber de estas cosas. Del Bosque puso esas palabras que ponen las personas curadas de todos los espantos. Fueron pequeñas imágenes habladas que harán grande la noche. La radio, desde muy temprano, puso proa al larguero, ese punto final en el que desemboca el deporte cada noche. Y una vez aquí, en un rincón del Bernabéu, ya sin luces, ya sin cohetes, ya sin llantos, ya sin risas, ya sin nervios, cerquita del Asador Donostiarra, que hoy tiene permiso de pernocta, sólo se me ocurre volar con el folio a La Coruña, acercarme a la fuente de Cuatro Caminos y mojar en ella este fervor gallego que me sale del bolígrafo cuando mi tierra es noticia.
A este paso, los de Operación Triunfo van a tener que incluir en su repertorio lo que cantamos aquella noche de mayo y que hoy se va de copas con el Depor. En fin, amigo mío, que hoy unos lloran el centenario y otros bailan la muñeira.


Felipe Senén, publicado en La Opinión de La Coruña el 10 de marzo de 2002

Se me deran a escoller, eu non sei que escollería... a noite daquel día

Tocaría hoxe falar dese Deportivo Depurativo e do Centenariazo, que acuñará un síndrome e será fito dun antes e un despois na historia do fútbol, punto de encontro de tantas filias e fobias. Pero confeso que son moi parcial no caso: recoñezo en Lendoiro ó mago deste sono que crea parroquia de ilusión, en tantas ocasións figura interesadamente distorsionada, sendo quen é capaz de ampliar polo mundo e coa mellor sona o nome da Coruña e a situación de Galiza no planisferio. 0 Depurativo e o Apóstolo Santiago son tarxetas de visita para circular por onde se queira. Por eso e pola carga de futuro somella que alguén ¡le teme a ó Presidente que sempre está disposto a sumar, a facer equipa, pero doutro xeito e coas regras de ouro ben marcadas: cualidade, constancia e paixón. Xenio en facer que o tolerante e multiracial SuperDeporperdure máis alá dunha década, consolide seus alicerces de futuro e actúe como un depurativo que trastoca a equipas que son máis que un club ou mesmamente cabeceiras do estado e do mundo: o realísimo Madrid, tremou como o mesmísimo Sir Francis Drake ante os coruñeses, tivo pánico escénico no seu propio territorio e os que somellaban convidados de pedra fixeron que -trocando a orde dos tópicos- Madrid fora unha Coruña en grande. Noutrora falaremos neste Labirinto do que adiantamos hoxe, e será preferiblemente nos momentos menos eufóricos, cando caían os lostregazos e soen os tronos, cando cumpra a man apaixoada dos leais xiareiros.

La enseñanza principal del Depor
por Alfredo Relaño, publicado en AS el 8 de marzo de 2002

Lendoiro puede respirar feliz. Este Dépor hace mucho que dejó de ser un equipo revelación. Este Dépor ya es un grande. Y además, ahora es más querido que nunca. Cuando apareció en el primer plano, su imagen venía lastrada por dos razones. Una, que se pensaba que sería poco más que flor de un día; se le concedía un gran mérito, pero no se confiaba en que durara. Otra, que estaba lleno de extranjeros; participó hasta el exceso de la moda de fichajes externos masivos que se desencadenó como consecuencia de la célebre Sentencia Bosman. Bueno, pues ya no es así. Ni una cosa ni otra. No es flor de un día. Lleva años compitiendo entre los grandes, tiene una Liga y dos Copas y lo último ha sido irrepetible: tocarle las barbas al veneradísimo Madrid del Centenario en su propia casa. Una victoria grande, labrada con el mejor fútbol posible y celebrada con grandeza, sin desprecio ni burla, incluso con cierta compasión por el vencido. Y ya no es una legión extranjera. Ahora este equipo es uno de los principales viveros de la selección española, lleno de jugadores internacionales o que pueden serlo en breve. El mérito de Lendoiro es colosal. Convirtió un equipo ascensor primero en un aspirante, luego en un campeón. Cuando vio que el cambio de los foráneos no era grato a la gente, cambió de rumbo. Es curioso el caso de este hombre, un vocacional de la dirección deportiva. Desde adolescente. Antes del Depor ya hizo un milagro con el Liceo de hockey sobre patines. Sabe algo que otros no saben. Sin duda porque se dedica a esto por pura vocación, en un mundo en el que sus colegas son gente con éxito en otros campos que prueba suerte en el fútbol.