Adrián López, capitán del RC Deportivo, compareció este mediodía en la sala de prensa del Estadio ABANCA-RIAZOR.
El delantero asturiano reconoce que "no es fácil entrenar todos los días sabiendo que ya estás descendido, que no puedes hacer nada a nivel de puntos o de clasificación. El equipo por lo menos sigue trabajando, sigue implicado, que creo que es lo importante y que es la imagen que tenemos que dar en este final de liga".
Por este motivo, insiste en que "no son semanas normales, a las que estás habituado. Siempre preparo los partidos para conseguir los puntos, para conseguir objetivos. En este caso hace ya unos cuantos partidos ya sabemos que estamos descendidos. Es difícil estar al 100 por 100. Pero el equipo lo está haciendo. Es lo que debemos hacer porque somos profesionales, es nuestra obligación".
Cada día, Adrián advierte que ve a sus compañeros, al equipo "entrenando de una manera muy buena. Y eso es algo a destacar en favor del equipo".
Comprende las protestas de la grada: "Si las cosas van bien la gente te aplaude y si las cosas van mal, la gente te pita. Es normal. Es la manera de hacer ver que no están contentos. Es normal por cómo ha ido la temporada. Nosotros lo único que podemos decir es que hemos intentando hacerlo lo mejor posible. Es una pena que cuando hemos reaccionado como equipo, haya sido tarde. Lo hemos dejado todo por el equipo".
En esta línea, manifiesta que "todos nos sentimos responsables de que hayamos descendido. Es un tema de todos los que formamos el Deportivo. Estamos todos con nuestra parte de culpa. Nadie puede estar contento con el trabajo que hemos hecho este año".
Confiesa, a pesar de la tristeza que supone el descenso, estar "muy orgulloso de haber vuelto aquí. Para mí ha sido un orgullo volver, un orgullo llegar a ser capitán del equipo".
Sobre su futuro, insiste en que es jugador del FC Porto "y en principio tengo que ir para allí. No sé muy bien lo que va a pasar. No sé lo que pasa en los veranos allí". Aunque sí admite que "soy feliz aquí. Siempre que estuve aquí fui feliz, a pesar de haber vivido dos momentos muy complicados. Es el equipo en el que debuté, es el equipo en el que más años jugué durante mi carrera. Por lo tanto es un sitio en donde me encuentro como en casa. Soy feliz. Pero tampoco quiero hablar mucho de mi futuro porque no depende de mí", concluye.
