RCDeportivo RCDeportivo RCDeportivo
Skip to main content
ES

Semblanza de Eduardo González Valiño Chacho

En el marco de la XLIV edición del Trofeo Teresa Herrera estaba prevista la inauguración del monumento a Chacho el día 12. Tan loable iniciativa había sido promovida por Eladio Muiños, Presidente de la activa peña deportivista O’Tizón. El monumento estaba

LA FIGURA DE CHACHO

Estos días se habla insistentemente de la figura de Eduardo González Valiño, conocido futbolísticamente como Chacho, uno de los jugadores coruñeses que forma con Acuña, Suárez y Amancio lo que podría ser la “galería de oro” del Deportivo, club al que pertenecieron en diferentes épocas. (...)

Chacho fue un auténtico producto de la llamada “escuela coruñesa” de fútbol, con todas las virtudes y defectos que ello incluye. Es decir, clase extraordinaria alternada con cierta apatía, especialmente por lo que se refiere a quienes jugaban de delanteros, como sucedió años más tarde con Manolo Lechuga y Luís Suárez, los cuales seguían una norma de comodidad al decir: el balón es el que debe correr. Pero cuando ese balón llegaba a sus pies, haciendo poco por buscarlo, lo jugaban de maravilla. Amancio, sin embargo, ya fue de otro estilo dado su comportamiento temperamental. Volviendo al recuerdo de Chacho, su biografía futbolística empieza cuando Rodrigo García Vizoso, con su “ojo clínico” habitual, lo descubre jugando en el Varela Silvari. La opinión técnica de Rodrigo hace que Chacho pase pronto al Deportivo cuando era todavía un chaval. Pronto se demuestra su excepcional clase y pasado el tiempo formaría con Diz un ala izquierda famosa en las filas del Deportivo, al igual que la que años más tarde integraría el propio Chacho con Chao. Ellos completaban un ataque blanquiazul en el que también figuraban Breijo, Guimeráns y Elícegui, participantes en el primer ascenso del club coruñés a la División de Honor, al ganarle al Murcia la correspondiente promoción.

Chacho también perteneció al Atlético de Madrid las temporadas 1934-35 y 1935-36. De su estancia en el club rojiblanco existe el dato importante de haber fallado un penalty que le costó el descenso a Segunda División al Atlético. Fue internacional en tres ocasiones jugando contra Bulgaria, Portugal e Italia, en este último caso durante los campeonatos del Mundo de 1934. Precisamente en el partido frente a Bulgaria Chacho marcó seis goles estableciendo así un récord en el fútbol internacional español como marca goleadora de un solo jugador.

La figura de Chacho, pues, merece sobradamente que se le dedique un monumento como futbolista fuera de serie que fue. Desde luego, con una apatía en el campo que era reflejo de su carácter personal, pero demostrando siempre una elegancia y clase superior en los regates, pases profundos y remates impresionantes con su pierna “buena” que era la izquierda. De constitución física frágil, resultó frecuentemente víctima de las lesiones. Aún así proporcionó muchas jornadas de gloria al Deportivo, que ahora se recuerdan en víspera de la inauguración de su monumento.