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Oltra, en el programa 'Sin Rodeos' de Localia TV, le da una matrícula de honor a la afición

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"-Tras un inicio de liga irregular, su equipo se ha ido adaptando a la categoría y ha terminado la primera vuelta de líder. ¿Era este el ritmo y la evolución que usted esperaba?

-No es el ritmo que esperaba, a nosotros nos hubiera gustado ser líderes desde la primera jornada hasta la última pero sí es verdad que esto tiene su proceso y creo que ha habido varios factores que han influido. En primer lugar, hay un proceso de adaptación a la categoría, nosotros hemos pasado ese proceso, nos ha costado un poquito hasta que le hemos cogido el aire. Luego ha habido un periodo de adaptación, me hubiera gustado que fuera menor, y con ello no digo que el equipo ya esté al máximo de adaptación pero está mucho mejor en cuanto a la idea de juego, al modelo, a las ideas nuevas del entrenador, lo cual también tiene su proceso. Hemos pasado a estar más cerca de esa idea. En definitiva, lo principal es que ha habido un momento en el que hemos tenido muchas ausencias, muchas lesiones, todas al mismo tiempo, gente sancionada, gente con la selección y, al final, el fútbol es de los futbolistas y cuando los tenemos a todos, teniendo una buena plantilla como afortunadamente tengo, pues los resultados han empezado a acompañar y hemos llegado a donde queremos estar. Ahora lo difícil es mantenernos, no hemos hecho absolutamente nada, queda un mundo, pero estamos en el camino y sobre todo la línea es ascendente, creciente y cada vez el equipo está más seguro, compitiendo mejor, con mejores sensaciones.

-De todas formas, aún hay muchas cosas que mejorar y queda lo más duro de un largo campeonato…

-Si por algo se define la Segunda es por la igualdad y porque es un campeonato larguísimo, somos dos equipos más que la mayoría de competiciones. Es una liga que se te hace eterna, por eso has de tener fondo de armario, como se suele decir, afortunadamente en el Dépor lo tenemos y estamos en el camino, pero todos somos sabedores de que no hemos hecho nada. Esto es una carrera de fondo, estamos prácticamente a la mitad, hemos hecho una primera vuelta francamente buena en cuanto a números, mejores en sensaciones conforme va pasando la competición y esperamos hacer una segunda vuelta, como mínimo, como la primera intentando mejorarla para lograr el objetivo que es lo que todos queremos.

-La afición está respondiendo muy bien, pero a veces es exigente, sobre todo cuando mira para las bandas, que  a veces da la impresión de que por ahí hay algunos problemas.

-¿La afición? Ésta y todas son soberanas y la nuestra es maravillosa, es espléndida, porque la reacción que ha tenido después de un hecho traumático como es un descenso, de volcarse con el equipo, de apoyar ya en ese momento al grupo de profesionales que había, y luego a todos los que hemos llegado, estaban desde el primer día respaldando… En el primer entrenamiento había gente en Abegondo, el campo lleno cada semana…Solo podemos darles gracias. Si a ellos les parece que las bandas pueden ser mejorables, pues no me queda más que respetar y trabajar para que las bandas y todo lo demás mejore. Pero bueno, yo creo que tenemos un equipo con muy buenas bandas, con gente en los costados que hace daño, que llega, que trabaja. ¿Es mejorable? Todo es mejorable, ¿qué podemos hacer más? Si, y además nosotros tenemos que ser exigentes con nosotros mismos y saber que todavía no hemos tocado techo, que todavía hay un margen de mejora y para eso trabajamos. Me gustaría adquirir la excelencia que en el fútbol no es tarea sencilla.

-¿Por qué se lleva tan mal con la prensa? ¿O la prensa con usted? Al menos eso parece escuchando algunas ruedas de prensa en las que su particular ‘vehemencia’ a veces parece otra cosa…

-Yo no tengo ningún problema con los medios, no lo he tenido nunca y no lo voy a tener aquí tampoco. A veces soy vehemente, cuando voy a la sala de prensa no voy como José Luis Oltra, voy como entrenador del Deportivo de La Coruña y como entrenador del Deportivo de La Coruña me gustaría que se valorara lo que hacen los futbolistas. No es un tema personal, no es que quiera que no se me critique, que no se me exija. Entiendo que estoy en un entrono acorde a la grandeza que tiene el club, grande y exigente, sabíamos a donde veníamos. Pero bueno, a veces pienso que no se termina de valorar y a veces contesto de forma demasiado vehemente. A veces soy yo mismo el que llego a casa y me digo que no me vale la pena entrar en estas batallas porque mi guerra no es contra los medios, mi guerra es con mi equipo, para sacarle rendimiento y contra el resto de rivales, y en ese sentido la gente aquí es libre de opinar y la verdad es que fuera de lo que es la sala de prensa, donde intentas explicar y a veces te das cuenta de que no vale la pena entrar en esos temas, intentaré en el futuro no parecer (enfadado), porque el que realmente me conoce sabe que no soy como me estoy mostrando en algunas ocasiones. Intentaré mirar para otro lado o no convencer, sino simplemente contestar de forma más escueta para que no haya tanto debate, para que no haya tanta polémica y sobre todo en otro tono para que no parezca que soy una persona huraña, un persona a la que le gusta el follón o la controversia con los medios porque siempre he tenido muy buenos amigos en los medios de comunicación, he trabajado en los medios de comunicación y sé perfectamente como funcionan… Así que tengo ningún problema. Los medios de aquí no son diferentes a los de otro sitio. Te aprietan porque las expectativas de este año, del club, son altas. Yo creo que se nos pasa factura de otros factores, de otras temporadas y eso a veces te sabe mal y que no se valora, sobre todo, el esfuerzo y el trabajo que están haciendo los futbolistas por conseguir los resultados. Además ahora el equipo está líder, en una buena línea y me da la sensación de que siempre falta algo, pero bueno, más allá de esto no quiero entrar en ninguna polémica con los medios porque realmente no la tengo.

-La entrega de los aficionados que a veces se vuelve exigencia ¿condiciona? ¿Llega a crear excesiva presión en el equipo? ¿O por el contrario es un factor de motivación para que el equipo se sienta cada vez más grande?

-Nosotros intentamos canalizarlo para que sea un elemento de motivación. Ver el campo, Riazor, con el colorido de la gente animando, volcada, ver los desplazamientos con la gente allí respaldando, ver la respuesta en el número de abonados que tiene el club, ver que la gente no desfallece, que está siempre con nosotros, creo que es un elemento positivo que, al contrario, condiciona al rival, al árbitro y a nosotros nos ayuda. Es cierto que en determinados momentos te puede llegar un malentendido y generar presión, ansiedad, exceso de responsabilidad… Todo esto en el sentido negativo no es positivo, pero aquí yo solo lo he notado en lo positivo. El grupo está convencido de que puede –trabajando--, darle alegrías a la gente, porque sabe que lo merece y en ese sentido lo hemos intentado llevar siempre hacia lo bueno y aquí nos están ayudando mucho. El otro día me pedían una valoración de la primera vuelta, una nota para el equipo, le di un sobresaliente y me preguntaron por la afición y le di una matrícula. Los únicos que de momento tienen la mejor nota, los que no han fallado son la afición.

-Comentaba tras el partido ante el Cartagena que “lo que está haciendo el Dépor tiene mucho mérito”…En su opinión, ¿qué le falta a este equipo para que no tenga que sufrir tanto en cada encuentro?

-Ahí tendríamos el debate por el que siempre entro a explicar y a lo mejor no tendría por qué. ¿Sufrir? A lo mejor de aquí a unos partidos, ojalá Dios no quiera, preferimos seguir sufriendo y seguir ganando que no sufrir y acabar perdiendo o empatando. Ahora llevamos seis partidos consecutivos ganando. Nadie gana fácil en esta categoría, nadie se pasea, ni en esta ni en ninguna, Madrid o Barcelona tampoco…Ves que el Madrid está sufriendo para remontar cada partido, ves que el Barcelona fuera de casa no tiene los mismos números. Cada vez es más complicado ganar y nosotros, aunque que lo dije en su momento pero por otro sentido, no somos ni Madrid ni Barcelona, nos cuesta. Atlético de Madrid, Sevilla, Zaragoza, Betis…equipos similares al Deportivo han estado en esta categoría y les ha costado retornar. Nosotros, francamente, estamos en una buena línea. A mi me gustaría ganar por más diferencia, pero realmente si ves los partidos, sufrir, sufrir, sufres por el marcador tan ajustado, no por el juego que está haciendo el equipo. Con todo y con eso, a mi me gustaría ganar por más y los jugadores son los primeros que querrían ganar por más, ganar más sobrados, que nadie sufriera. Mi corazón sería el primero que no sufriría pero al final es que es muy difícil, esto está muy igualado y hay que darle valor a lo que tenemos. Pero no quiero entrar en otros debates porque si no luego se malinterpreta.

-Entonces, cuando a principio de temporada aseguraba que el Dépor tendría que ser el Madrid o el Barça de la categoría…¿a que se refería?

-Pues muy fácil, a que éramos el rival a batir. En Primera, cuando juegas contra el Madrid o el Barcelona son los equipos que siempre motivan, esos días el campo está lleno, aquí lo habréis vivido, yo lo he vivido en otros sitios, venía Madrid o Barcelona y Riazor se llenaba, venía el Rácing de Santander, que era un equipo de la misma categoría, y había veces que se podía llenar y otras que no. Además, está la motivación de los jugadores, están las ganas de ganarle al equipo favorito… Y nosotros somos favoritos, eso hay que asumirlo con naturalidad y normalidad. Cuando nosotros vamos a los campos es día del club, se hacen fiestas para recibirnos, hay gente esperándonos en los hoteles, sobre todo a Valerón, a Aranzubía y a los buenos…A mi no me espera nadie, por desgracia…pero bueno, es la realidad de lo que es el fútbol…por eso dije: ‘caray, vamos a motivarlos a todos’. Pero claro, al decir somos el Madrid o el Barcelona en vez de decir somos el equipo que va a motivar a todos los demás, ya no es lo mismo y si no se interpreta bien, no es lo mismo y yo dije somos el Madrid o el Barcelona no dije somos el rival a batir, somos el equipo favorito, somos el equipo que vamos a motivar a todos. Por eso digo que a veces la culpa la tengo yo mismo por generar los debates, si estuviera calladito, si no dijera tantas cosas, si no hablara tanto…no la liaría. Pero ya puestos, me vais a permitir, también dije en esa misma rueda de prensa que de los últimos 30 equipos que habían descendido, en las últimas diez temporadas, solo habían subido cinco el primer año, solo cinco de los últimos 30, con lo cual, hablaba de la dificultad de la categoría. En los últimos diez años, que vuelven a ser 30 equipos, solamente han sido líderes al final de la primera vuelta, de los 30 que han descendido, uno, que ha sido el Deportivo de La Coruña y sin embargo siempre hay peros, siempre falta algo, dicen que se sufre…siempre vamos al lado negativo. A mi me habéis hecho entrevistas de valoraciones de la primera vuelta acabando de primeros y la pregunta es: ¿qué le falta al equipo?, ¿por qué sufre el equipo?, nunca es ¿qué ha hecho bien el equipo?, parece que sea más demérito de los demás que mérito del Deportivo, y nosotros llevamos seis victorias consecutivas, 45 puntos a estas alturas, algo haremos bien, el equipo tendrá una propuesta, tendrá fútbol. Algunos partidos hemos tenido suerte, no lo niego, como el del Villarreal, pero otros la hemos tenido muy mala, el día del Hércules y otros muchos…pero bueno, al final esto se va equiparando, igualando y, repito, el equipo tiene argumentos y sobre todo tiene un vestuario, un grupo, magnífico que desde el principio he defendido a muerte y por eso vienen los enfados, porque no se le valora lo suficiente lo que está haciendo. Pienso que al final el equipo va a lograr el objetivo porque es un grupo muy unido y muy responsable.

-Usted prefiere siempre estar en un segundo plano y dar el mérito a los jugadores, pero algo de ‘culpa’ de lo que está pasando tendrá también José Luis Oltra, ¿o no?


-Aportaré mi granito, pero realmente estoy convencido de que los protagonistas en este deporte son los futbolistas, pero convencido, y yo los tengo buenos, y cuanto mejores futbolistas tienes, mejor entrenador eres y los resultados más acompañan. Eso es una relación directa. Esa es la realidad, que son ellos los artífices. Creo además que los entrenadores tenemos que asumir un mayor protagonismo si las cosas no van bien, pero cuando van bien, realmente, creo que hay un mérito grande y esta plantilla lo tiene porque tiene calidad, sobre todo, tiene argumentos, tiene mucha gente en muchas posiciones y determinante además y lo están demostrando.

-A estas alturas ya debe de conocer bien al presidente, ¿cuál es su relación con Augusto César Lendoiro? ¿Tiene la impresión de que es un presidente que da mucha autonomía al entrenador, incluso demasiada?


-Creo que demasiada no. Es verdad que da mucha autonomía, mucha estabilidad. No he tenido, ni sé si tendré, un presidente, primero de la capacidad que tiene el del Deportivo de La Coruña, Augusto César Lendoiro, y segundo que te transmita esa tranquilidad, esa seguridad, esa confianza, que te refuerce, que te de realmente lo que tiene que tener el entrenador, en este caso autoridad de cara al grupo. También de cara al exterior, pero fundamentalmente de cara al grupo y él, eso lo tiene. Autonomía te da porque él nunca se inmiscuye en el trabajo del entrenador pero también es verdad que no es que te deje hacer todo lo que te de la gana, él está muy pendiente de todo, aquí en este club no se mueve una silla si no es con el beneplácito, entre comillas, del presidente y él está pendiente, no porque tenga que controlar todo, si no porque le gusta saber todo, conoce absolutamente todo lo que pasa en el club, está las 24 horas dedicado al mismo. Es muy buen presidente, mi relación con él es como es él, una persona cercana, especial, porque con él las reuniones suelen ser para cenar y después un poquito más rato, duran un poco pero es cuando hay que departir, a él le gustan así y los demás nos acoplamos y la verdad es que es una persona que vale la pena, que te enseña, que aprendes con él. A mi me hace sentir muy a gusto cuando estoy con él, educado, correcto, puedes hablar de cualquier tema y, fundamentalmente, hablamos de fútbol y del Dépor, pero con él se puede dialogar absolutamente de todo.

-Lendoiro no se cansa de decir que el único objetivo es el ascenso, ¿lo tiene usted así de claro o cree que tiene algún margen?

-No, no hay margen. No es que te deje margen, él sabe como es el fútbol. Yo tengo claro cual es el objetivo, lo que pasa es que eso no quiere decir que no pueda pasar otra cosa. El único objetivo que hemos asumido desde el principio es ascender y devolver al equipo donde tiene que estar, en Primera División. Se ha hecho un esfuerzo para ello. Pero bueno, hay muchos oponentes, muchos quieren lograr lo mismo que tú, hay un componente de azar, porque esto es un juego, deporte, pero tiene un componente de juego importante y hay muchos factores que influyen y que al final no todos dependen de ti. Nosotros intentamos, yo como entrenador, manejar los que dependen de mi, el grupo, el trabajo táctico, muchas cosas en las que sí puedes incidir y sobre ellos me centro y me ocupo y todo lo demás, sabiendo el objetivo…cuanto más obsesionados estemos en el objetivo, más presión y aspectos negativos nos van a generar y yo de lo único que me preocupo es de ganar el siguiente partido, intentar que el equipo gane el siguiente partido. Si ganamos muchos partidos tendremos más posibilidades de lograr el objetivo y estaremos dentro de lo que se nos ha marcado, pero tampoco es que él me apriete especialmente. Somos claros y sabemos, yo para que he venido y el equipo qué es lo que tiene que hacer.

-A pesar de que todos saben lo difícil que es, ¿sería un fracaso no ascender esta temporada?

-Yo ahí no respondo, sería un fracaso o no, vamos a ver como sucede. Ahora mismo todo el mundo piensa que vamos a ascender, que vamos a ascender con la gorra, que vamos a ascender de forma directa, como primero o como segundo y yo sigo teniendo los pies en el suelo y sabiendo que es muy difícil, intentando alertar a todo el mundo. Prefiero que haya euforia, no duda o pesimismo, pero yo lo que intento es que esa euforia no afecte al grupo y que sepamos que cada partido hay que disputarlo y que esto es muy complicado. Hay siete u ocho, o diez equipos en la misma pelea y vamos a ver como se produce. Si al final no pudiéramos ascender, analizaríamos por qué y veríamos si es una culpa nuestra, mía… y analizar si es un fracaso. Pero bueno, el objetivo está claro, es ascender y para eso trabajamos y a día de hoy estamos en el camino. Entonces, prefiero no pensar que no vamos a conseguirlo y si no lo conseguimos, lo analizaremos.

-Usted ya sabe lo que es ascender un equipo a Primera, lo ha hecho con el Tenerife. Si lo consigue con el Dépor, en este caso con el reconocimiento o el premio de continuar una temporada más, es eso lo que desea, espera y quiere?

-Obviamente, para eso hemos venido. Soy de los que piensa que los contratos están para cumplirlos. A mí me gustaría, no solo cumplir el contrato que tengo firmado que es de un año más otro en caso de ascenso, sino poder prorrogarlo y poder estar mucho tiempo. Estoy encantado aquí, mis niños y mi mujer están encantados. El otro día me han preguntado, que nunca lo habían hecho, cuánto tiempo me gustaría seguir…y esas cosas a mí me llegan, porque ves a tu familia feliz, yo estoy en un club que es maravilloso, estoy en una ciudad en la que estoy encantado, no le puedo pedir más, ojalá pueda estar mucho tiempo aquí, pero bueno,  yo soy de los que no valoro lo que pueda pasar o como voy a celebrarlo. Ahora mismo en mi cabeza solamente está el partido del sábado con el Recreativo de Huelva. Si todo sale como esperamos, cumpliremos cuando menos ese contrato, espero, y luego ya nos plantearemos el poder seguir en un club tan importante como el Deportivo de La Coruña.

-Encantado con la ciudad, con el club…y la afición de Riazor, ¿qué nos cuenta del espectacular ambiente de este estadio, el octavo de España al que más gente acude (los siete primeros son de Primera)?


-Los siete primeros son de Primera y son prácticamente los siete de arriba, Barcelona, Madrid, Valencia, Atlético de Madrid, me parece que el Betis, y no recuerdo cual es el otro equipo, me parece que es el Sevilla…estamos muy por encima de la media. La gente ha valorado lo que tenía, lo que ha perdido y se ha volcado con el equipo, está maravillosa, lo he dicho desde el primer día, la respuesta que tuvo y el ejemplo que nos sigue dando cada semana. No tengo palabras para definir esta afición, esta actitud de apoyo al equipo, de apoyo personal, tanto en el estadio como, me atrevo a decir, en la vida privada, te hacen sentir bien, por eso estoy contento en la ciudad, con el club, te hacen sentir a gusto. Me han dicho muchas veces que A Coruña es la ciudad donde nadie se siente forastero, no sé si es aquí así o en más sitios, si es verdad o no, yo os digo como me hacen sentir a mi y a mi familia y estamos encantados, tanto en el colegio, en nuestra vida cotidiana y por supuesto, obviamente, lo importante que es que lo profesional vaya bien, porque si no acompaña no puedes estar del todo a gusto. En estos momentos va todo conforme nos gustaría que fuera y se mantuviera mucho tiempo.

-Además de la magia de Riazor, ha vuelto esta temporada la magia de Valerón, que estaba un poco escondida porque el anterior entrenador no tuvo el año pasado la confianza que usted está teniendo en él. De todas maneras, teniendo su edad y sus circunstancias ¿convendrá gestionar los tiempos de esa magia de Valerón en el campo?


-Eso llevo escuchándolo desde que llegué, si deberíamos tener cuidado, no quemarlo, dosificarlo…Valerón, el ‘Flaco’, como a él le gusta que le llamen, como le llamamos todos cariñosamente, primero, es un futbolista que se cuida mucho, es una persona impresionante, como él no hay dos, y él está bien, no ha dejado de entrenar ningún día, no ha tenido prácticamente ninguna molestia y mientras él se encuentre bien y yo lo vea para competir,  competirá. Él no es intocable, habrá partidos, ya ha habido alguno en el que no lo he puesto fuera, habrá algún partido fuera que juegue, habrá muchos partidos en casa que no juegue…intento hacer lo mejor para el equipo, él es uno más, lo que pasa que uno más importante porque es muy bueno, es un jugador que nos da muchas cosas. Por las circunstancias, antes jugaba menos, ahora con nosotros está participando algo más, pero, evidentemente, no lo he descubierto yo. A estas alturas, con la edad y la trayectoria que tiene, él muestra el fútbol que tiene y yo intentaré ponerlo cuando crea que deba y cuando no, no lo pondré, y habrá gente que dependiendo del resultado o el rendimiento me dirá: ‘claro, es que tenías que haberle dado más descanso o menos…’ Esto es opinable, es respetable, no me queda otra que tomar decisiones y que la gente debata porque está lo grande del fútbol.

-El caso es que gracias a usted podemos disfrutar de Valerón.

-No, gracias a Valerón fundamentalmente. Yo te digo que a lo mejor en las circunstancias del anterior entrenador a lo mejor hubiera hecho lo mismo, no lo sé. He visto una categoría, un equipo que es el mío, unos rivales, está claro que tengo una idea de juego que no es ni mejor ni peor que la del anterior, es distinta, y en esa idea, a lo mejor, encaja más un jugador como Valerón y lo único que he hecho es ponerlo un poco más, pero el que juega es él, yo no le digo como tiene que hacerlo, ya me gustaría a mi, yo aprendo con él, no él conmigo.

-Aunque las comparaciones son odiosas, lo cierto es que a usted no le duelen prendas a la hora de cambiar a algún jugador si el rendimiento no es el esperado, caso de Jesús Vázquez…


-Los entrenadores estamos para gestionar, para hacer muchas cosas, no solo para alinear, no solo para hacer cambios, que la gente se confunde. En el caso de Jesús me sabe fatal, como en el de mucha gente que no está participando. Parece que a Jesús se le ha señalado porque él no juega y ha entrado Juan y el equipo está jugando mejor…pero yo creo que si hubiera sido a la inversa, si el que hubiera jugado al principio hubiera sido Juan y el que hubiera entrado hubiera sido Jesús estaríamos en las mismas. Jesús deja de jugar porque está amonestado, entra Juan, lo hace bien, creo que es bueno para el equipo, lo mantengo, le doy continuidad y Juan está rindiendo muy bien, pero es que creo que Jesús tiene muy buenas condiciones, aparte es un líder dentro del vestuario, es un tío que trabaja fenomenal, que no le ha cambiado la cara, que aporta, que ha asumido su rol, que no es fácil en un jugador de esa trayectoria, y con el que estoy encantado. En el futuro va a ser importante dentro del grupo, ojalá lo pueda ser en el terreno de juego también porque condiciones tiene y mi confianza en él está intacta, como en todos los que tengo en la plantilla, porque tengo una plantilla muy buena".