Manu Sánchez, técnico del Deportivo ABANCA, y Esther Sullastres, guardameta del conjunto deportivista ayer en el Estadi Johan Cruyff de Barcelona, pasaron esta mañana por la sala de prensa de Abegondo, nada más aterrizar en el Aeropuerto de A Coruña el avión en el que regresó la expedición deportivista.
El técnico deportivista resalta que con poco tiempo para preparar el partido de cuartos de final de la Copa de la Reina ante el FC Barcelona, actual subcampeón de Europa, "salió todo a la perfección. La base de esto no es cerrarse atrás. Era anular el juego interior del Barça, evitar esas segundas jugadas, esas transiciones rápidas en campo rival. Salió todo espectacular. No sé si alguna jugadora de esta liga ha robado tantos balones como Nuria con Hansen. Las paradas de Sulli, bueno... Como entrenador no creo que haya vivido como eso. El momento estelar es cuando fuimos a saludar a la gente del Dépor que había allí, toda la afición del estadio ovacionó al equipo. Se te queda el cuerpo de aquella manera".
Por su parte, Esther Sullastres, protagonista del encuentro por su gran actuación, confiesa que se quedó con la sensación de que "esto es histórico pese a quien le pese. El planteamiento fue muy bueno. La gente que ahora está llorando, desconsolada, en unos meses se va a dar cuenta de lo que hemos conseguido. Mi primera sensación que tengo es que me siento feliz desde la decisión de venir aquí, del trabajo diario".
Sánchez sostiene que "con jugadoras como Esther y con el resto de futbolistas que sobre todo son grandísimas personas, todos estos momentos se llevan más fácil, de otra manera".
La guardameta blanquiazul confiesa que apenas pudo dormir esta pasada noche "por la excitación post-partido, de pensar en cada jugada, de ver lo que estábamos consiguiendo. No somos conscientes de lo que estamos consiguiendo, lo vamos a valorar con el paso del tiempo. Me despertaba a mitad de la noche. Creo que dormí apenas 3 o 4 horas. Estoy muy feliz por todas, por cómo fue el partido".
El entrenador deportivista cuenta que "tuve la mala suerte de tener Barça TV y a las 2 de la madrugada pusieron el partido. Y lo tuve que ver. Difícil de digerir tal y como sucede. Por el trabajo que realizaron en el campo se merecían el premio de los penaltis. Un día duro pero con tiempo le daremos más importancia, más valor".
A Sullastres le sirve de consuelo que "la media de goles en la Ciudad Deportiva del Barça era de 3 o 4 por partido. En los últimos partidos veníamos cometiendo fallos defensivos, que estamos arreglando. Conseguimos dejar la portería a cero hasta 119 minutos en la Ciudad Deportiva del Barça. Hay cosas positivas. Vamos a quedarnos con eso, sabiendo de las dificultades que tiene marcarles un gol. Estamos muy contentas con el trabajo. No hemos tenido ni una semana para preparar el partido".
Manu Sánchez, por contra, cree que no hay consuelo: "Es un palo muy duro. Trabajamos este partido en 2 días. No teníamos mucho más. Salió todo a la perfección y te duele más aún. Tienes una sensación por una parte de orgullo por lo que ha hecho el equipo y por otro lado te queda ese regusto de 15 segundos que quedaban para la tanda de penaltis".
